La huida del mundo real

"Camarera, camarera, tú eres la cmarera de mi amor..." así rezaba el mambo que luego los horteras esos del grupo mexicano Garibaldi pusieron de moda en los earlies nineties. Y es que hoy me toca de nuevo trabajar en un bar. No me alegra pero me salva un poco la economía que está bastante tocadita. Así que, si ya estaba mal, ahora estoy peor... Encima tuve un touch con Mr. A que se puso tan a la defensiva que no me importó cortarle el MSN, es que me llamó depresivo y entendió todo al revés... no tengo humor para explicarlo todo, además todos estamos mal y todos necesitamos apoyo y comprensión. Por suerte o por desgracia viene mi tío, el hermano de mi madre, este finde y me he ofrecido a hacerles de guía turístico.. el sábado a ver cómo me lo monto para no llegar reventado a currar a las 9.15h que empiezo. Puf! esta vida... me va a matá.
Una buena noticia, el martes tengo un casting para Hospital Central, tengo que hacer de ecuatoriano, así que igual si no me cogen, la depresión total: no me cogen de español, no me cogen de ecuatoriano... será que nos bueno como actor??? o me lo tengo que empezar a plantear???? (porque el decolorarme el pelo para pasar por nórdico, lo he desechado).
Odio que quien tengo al frente tenga poca o escasa sensibilidad para recibir y entregar.
Odio que el otro no tenga la iniciativa.
Odio sentirme culpable.
Odio tener que parecer que necesito cariño.
Odio odiar.
Hoy estoy del misántropo total, he visto a un gilipollas enmedallado con banderitas de España y unas vírgenes y escarapelas de la falange colgando de la ropa, por la carrera de San Jerónimo, yo iba con Nuria, y me ha pedido una monedita... ¿UNA MONEDITA?,le he dicho, ...¡Viva la República! grité al final, mietras Nuria se reía y me decía, tío, estás loco...