La huida del mundo real
Blog de poesía y política
12.25.2005
Descubrimiento textil
Sin embargo,
al mirar el borde del cuello de su camisa,
algo de indefensión y dulzura se apoderó de su nombre;
aquel hombre,
por detrás:
engaño morboso de ejecutivo rudo,
por delante:
él,
disfrazando intentos vanos
de un no me importa,
que esconde una tristeza fractal
y se proyecta en geometrías infinitas:
la melancolía del ser,
su anhelo.
Y sin embargo,
el supermán al revés,
que en la cabina telefónica se quitaba el traje de poeta
para usar el de Kark Kent ante los peligros de la vida,
más vulnerable
y más hermoso,
en mi corazón germina.
Ya árbol milenario,
ya aire de cada día.
al mirar el borde del cuello de su camisa,
algo de indefensión y dulzura se apoderó de su nombre;
aquel hombre,
por detrás:
engaño morboso de ejecutivo rudo,
por delante:
él,
disfrazando intentos vanos
de un no me importa,
que esconde una tristeza fractal
y se proyecta en geometrías infinitas:
la melancolía del ser,
su anhelo.
Y sin embargo,
el supermán al revés,
que en la cabina telefónica se quitaba el traje de poeta
para usar el de Kark Kent ante los peligros de la vida,
más vulnerable
y más hermoso,
en mi corazón germina.
Ya árbol milenario,
ya aire de cada día.
Etiquetas: Poesía
:: León Sierra huyó a las, 09:14